En pleno 2024, la gran mayoría de las personas conocen Jujutsu Kaisen, ya sea por su manga o la tremenda popularidad que adquirió en su adaptación al anime. Por lo tanto, cuando se anunció Jujutsu Kaisen Cursed Clash, un juego de pelea tipo arena 2v2, muchos fanáticos de la obra pusieron sus expectativas en el título. Pero, ¿vale la pena? Antes de que tomes la decisión de comprarlo o no, en Neutral Game te contamos nuestra experiencia.
Lo primero con lo que nos recibe el juego es su menú de opciones, que al mismo estilo de un DVD de principios de los 2000, es un pequeño fragmento del anime que se repite en bucle. La secuencia solo cambia cuando transitamos entre los distintos apartados. Comencemos desglosándolos: primero nos enfocaremos en su modo historia, que es un resumen muy rápido de algunos eventos del anime. El problema radica en la forma en que los desarrolladores decidieron contarnos la historia. En lugar de una cinemática nueva, optaron por tomar frames del anime, completamente estáticos, y ponerles la voz de los personajes. Este estilo visual deja mucho que desear. Por otro lado, es una modalidad pobre y aburrida. Si bien sirve como tutorial para el punto fuerte del juego, que son sus enfrentamientos 2v2, parece más una pérdida de tiempo que un beneficio.

El modo entrenamiento de Cursed Clash es un 2v2 contra la CPU, dejando de lado el tradicional cuarto de entrenamiento con un personaje estático donde practicamos nuestros combos, algo que puede no ser del agrado de todos.
En cuanto a la jugabilidad, los controles se sienten muy lentos y repetitivos, ofreciendo muy pocas opciones para hacer algo realmente diferente entre partidas. Con la velocidad de su jugabilidad, la cámara se mueve por momentos de manera muy errática, perdiendo al objetivo de vista incluso con el bloqueo que permite el juego. Los combos son sencillos, teniendo un botón principal para el ataque básico, con el cual al conectarlo se va creando una barra de poder maldito que se llena con el tiempo y con la cual podremos utilizar una de dos habilidades especiales diferentes con cada personaje.
Con un total de 16 personajes seleccionables en el momento de su salida, el desbalance entre ellos es bastante notorio. Algunos personajes, como Geto, pueden borrar tu barra de vida en un combo, mientras que otros se sienten en total desventaja. Por otro lado, tenemos el modelado de los personajes, que, si bien no está mal, nos deja con la duda de si los reciclaron de los existentes en Fortnite.

El juego tiene un apartado llamado “coop online”, en el cual puedes unirte a otro jugador o a la CPU para ir derrotando hordas de espíritus malignos cada vez más fuertes. Este es uno de los puntos más fuertes del juego y realmente es un concepto divertido y fresco en el género.
Como punto fuerte y más importante, tenemos las batallas 2v2 online, las cuales se dividen en clasificatorias o de exhibición. En este apartado y después de una a veces no tan corta espera, el sistema te empareja con algún jugador con el cual deberás hacer equipo para derrotar al equipo enemigo. Cada equipo tiene 4 barras de vida y su barra de vida personal. Cada vez que tu barra personal llegue a 0, tu personaje quedará unos segundos en el suelo para reaparecer con su barra llena, pero perdiendo una de las 4 barras de equipo. El primero en quedarse sin estas, pierde la pelea.

Si bien esta modalidad es muy divertida (sin contar los detalles que ya se mencionaron) y puedes pasar unos momentos increíbles, debes tener en cuenta que si uno de los 4 jugadores experimenta lag, ya puedes ir a verte de nuevo el anime de Jujutsu porque la partida será injugable. Por otro lado, como mencionamos anteriormente, es un juego de equipo en el cual deberás apoyar a tu compañero y salvarlo de situaciones complicadas o realizar ataques en conjunto para derrotar al contrincante. Además, debes tener en cuenta el desbalance al enfrentarte a personajes como Sukuna o Geto, que en un par de golpes pueden terminar la partida.
El juego puede sonar desastrozo en muchos aspectos, también puede llegar a ser muy divertido si lo juegas en compañía de algún amigo para pasar esas tardes de aburrimiento. Sin embargo, el mayor problema radica en su precio, que ronda entre los 819 pesos mexicanos en su versión estándar y los 1369 en su versión definitiva, los cuales definitivamente no los vale. Jujutsu Kaisen: Cursed Clash es un juego que no quedará en la memoria de las personas de manera positiva, con su jugabilidad casi calcada de su hermano gratuito, también desarrollado por Bandai, My Hero Ultimate Rumble un pésimo apartado visual, un desbalance total de personajes y un precio excesivo, se lleva un 4 sobre 10.

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Morri